Compra compulsiva
La conducta habitual de comprar puede convertirse en problemática cuando se observa que el sujeto ya no realiza las compras con el objetivo de cubrir una necesidad material, siguiendo una actividad más o menos planificada, sino que compra por la gratificación inmediata que le provoca consumir. Es un deseo que no puede controlar sintiendo un impulso irresistible por la compra llegando a causar problemas económicos en el paciente y su familia por realizar adquisiciones que sobrepasan su capacidad adquisitiva.
Se presenta en ambos sexos y en el caso de las mujeres suele estar mas relacionada con productos de belleza o ropa, mientras que en los hombres es más común el material informático, los aparatos electrónicos, coches o motocicletas.
La adquisición de estos productos, aún siendo innecesarios, se lleva a cabo poniendo en peligro la economía familiar dejándola sin el dinero destinado a necesidades básicas, llegando incluso a solicitar préstamos que llegan a acumularse y ponen en peligro la estabilidad familiar.
Es habitual en todo adicto no reconocer el problema, negando su situación hasta que ya es demasiado tarde. Generalmente el adicto se da cuenta de que necesita ayuda cuando ya ha tocado fondo.
Es necesaria la ayuda especializada de un psicoterapeuta que junto con el soporte de familiares y amigos dirigirá la terapia cognitivo-conductual, siendo la más adecuada y es la que esta obteniendo buenos resultados.
Otra alternativa son las terapias de grupo o grupos de ayuda mutua, que son muy efectivas al poder compartir el problema con iguales.
